Asombrosamente, ninguna, ni en las alegorías, o símbolos arquetípicos, pese a las enormes diferencias culturales que puedan darse de una a otra parte del mundo y de uno u otro pueblo.
Los símbolos son patrimonio de toda la humanidad. Y en lo onírico tales figuras contienen esencialmente los mismos valores con que se forman los sueños en seres humanos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario