En el solsticio de verano, llegamos al punto de mayor luz, cuando el poder del Sol impregna las hierbas con propiedades mágicas y curativas especiales.
Para los romanos, la menta era un símbolo de hospitalidad, así que ¿por qué no compartir esta bebida revitalizadora y estimulante con amigos? Es la bebida perfecta para después de un ritual.
Ingredientes:
2 bolsas de té negro
3 ramitas de menta
2 tazas de agua hirviendo
Cubitos de hielo
Azúcar o miel al gusto
Rodajas de limón
Ramitas de menta para decorar
Preparación:
Introduce las dos bolsas de té y las tres ramitas de menta en una tetera y vierte el agua hirviendo.
Deja infusionar 3 o 4 minutos. Cuélalo y déjalo enfriar.
Sírvelo en vasos con hielo y endúlzalo al gusto.
Decóralo con una rodaja de limón y ramitas de menta.
-Anna Franklin