Soy incapaz de resistirme a sus encantos. Están allí en las casetas, colocaditos (o desordenados), esperando y me llaman…
Soy débil, lo sé. Y por ello trato de evitar la tentación.
Pero, ¡ay, amigos! hoy pasé por el terreno peligroso lleno de tentaciones y claro, caí…
Mi botín…
y la joya de mis adquisiones…
No hay comentarios:
Publicar un comentario