viernes, 24 de julio de 2009

LEÍDO EN LA VOZ D E AVILÉS…

ASTURIAS

El último canto del urogallo

Los expertos vaticinan que la especie desaparecerá en 20 años y que el centro de cría del Principado «será un zoo como el de Paca y Tola»

24.07.09 -

R. MUÑIZ

 

El último canto del urogallo

El desaparecido ejemplar, ante un vecino de Tarna. / EFE

Un vídeo desata las dudas sobre cómo murió 'Mansín' hace ahora un año

El canto del urogallo es una despedida. Lo saben los cazadores, que durante décadas aprovechaban el graznido que el animal emitía en el periodo de celo para localizarle y pegar dos tiros. Ahora el ave está para pocas batidas: dentro de un tiempo, se juntará con los dinosaurios en la lista de animales extinguidos. Los expertos lo tienen tan claro que hasta vaticinan cuándo se escuchará el último canto de la especie: dentro de 20 años.

Esa es la principal conclusión de las primeras Jornadas de Sensibilización de la especie, organizadas por la asociación Ecos Astures. «Lo peor de todo, es que no se puede hacer nada», sentencia su presidente, Vicente Suárez, antes de repasar unos datos que suenan a holocausto y que expuso el profesor de Ecología de la Universidad de Oviedo, José Ramón Obeso. En el año 2000 se realizó un censo sobre la especie. Se encontraron un 70% menos de ejemplares que en 1982. Actualmente la tasa de supervivencia es del 0,3 lo que supone que por cada tres polluelos que nacen, sólo uno llega a adulto.

Esa mortalidad la está comprobando el propio Principado en Sobrescobio. Allí tiene el centro donde ensaya un proyecto de reintroducción de la especie. La idea es acudir a los nidos y coger los huevos antes de que eclosionen. Luego los traslada a un centro especial donde a las crías se les ayudaría a salvar la vida. Esa era la idea. Según admite la Consejería de Medio Ambiente, eran trece los huevos con los que empezó el plan, pero de ellos sólo seis polluelos eclosionaron. Al menos dos de ellos murieron porque no se alimentaban y sufrían una infección bacteriana.

Con semejantes mimbres, los expertos dudan de la viabilidad del proyecto. «El centro acabará sirviendo de zoo para sensibilizar a la gente y que puedan ver algunos polluelos, pero no logra una producción de pollos como para repoblar», expone Suárez. De esta manera las jaulas de Sobrescobio terminarían como «una especie de cercado a lo Paca y Tola».

El ejemplo no es casual. Tras las osas de Proaza también está la historia de una especie, el oso pardo cantábrico, a la que pronosticaron una extinción segura. Fue hasta los años 80. Los plantígrados eran vistos entonces como animales que provocaban más destrozos que provecho. Hoy la impresión es justo la contraria. «Es el efecto de los 'animales bandera', los Paca y Tola, bichos con los que un día nos identificamos, y empezamos a sensibilizarnos con su especie», explicaba hace unas semanas Roberto Hartasánchez, presidente del Fondo para la protección de animales salvajes (Fapas).

El caso 'Mansín'

En el reino del urogallo también existía un nombre propio. Se le conocía como 'Mansín', y despertaba las simpatías por los pueblos de Caso. El ejemplar no tenía empacho en pasear por las calles, demostrando así «un trastorno de conducta que se ha observado en otros lugares donde el urogallo también está en las últimas», apuntan en Ecos Astures.

El pasado día 11 se cumplió un año desde que el ave fue hallado muerto en Tarna. Según la versión de la Consejería de Medio Ambiente, el ataque de un perro segó la carrera del urogallo más mediático. Es una explicación que fue cuestionada en las Jornadas de Sensibilización a raíz del vídeo que realizó un aficionado: «Se hizo unos días antes de que 'Mansín' muriera y en él se ve por las heces que dejaba el animal que sufría una infección de parásitos intestinales», expone Suárez. «Lo importante» -concluyen en Ecos Astures- «es que su muerte nos sirva de alerta».

Y añado yo: ¿porque siempre tenemos que poner a un animal al borde (con una pata más allá que p’acá) para hacer algo por salvarlo? Debo ser idiota porque no lo entiendo…

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