Gran parte de la cultura tradicional eslava giraba en torno a los ciclos de la agricultura, especialmente el cultivo, la siembra y, por último, la cosecha.
El Dożynki, que se traduce como "hogar de la cosecha", se celebra entre mediados de agosto y el equinoccio de otoño (e celebró el 28 de agosto).
La celebración comienza cortando de forma ceremonial la última gavilla de grano. A menudo se seleccionaba para este ritual una gavilla visible en el camino al principio de la cosecha y se adornaba con flores y hojas.
En las tradiciones antiguas, al propietario de una granja se le regalaba una corona de centeno y trigo, decorada con flores, cintas y avellanas. Por lo general, alguien entregaba la corona a una joven, que se ocupaba de la cosecha en reconocimiento a su excelente trabajo. A continuación, ella dirigía una procesión por los campos hasta la casa principal del campo, donde entregaba la corona al terrateniente y, en algunos casos, éste le hacía algún regalo de agradecimiento.
A continuación se celebraban bailes y banquetes.
-Diana Rajchel
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