Por la ventana se percibe el testimonio de la naturaleza viviente. La contemplación única de elementos prácticos, utilitarios, estériles, ajenos a lo vital o espiritual, acaba por ejercer un efecto deprimente que influirá negativamente en varios órdenes de la existencia. Pero, más aún, debe contar con un cierto nivel de condiciones propiciatorias para evitar al menos los inconvenientes del mal dormir.