Como es costumbre en mí, suelo poner las cosas cuando ya han pasado... pereza, falta de tiempo... llamádlo x...
OSTARA
Nuevas esperanzas, nuevos comienzos, nuevas relaciones. La tierra vuelve a despertar. Es la fiesta de la siembra. La fiesta de la fertilidad, de Eostre, una oscura pero alegre diosa anglosajona, una fuente de evidencias contrapuestas y de confusión. Ella cabalga en el punto de equilibrio entre los luminosos días y las oscuras noches.
Desde hace siglos se pintan huevos y se colocan en los santuarios de la diosa en todo el mundo. Según una leyenda druida, un huevo encontrado ese día era un huevo sanador escupido por serpientes (muy poderosas y útiles en las artes adivinatorias). El huevo ha sido durante mucho tiempo el símbolo universal de la fertilidad. El pariente de Eostre es la liebre, un símbolo natural de la fertilidad e inspirador de cantos y leyendas.
Levántate al alba este día y prepárate con esmero. Los planetas requieren tu atención para describir y explicar tus límites. Limpia tu aura, toma un baño y viste ropa limpia. Visita un río claro, un lago o el océano y sé testigo de la luz que baila en el agua. Medita. Si lanzas un pequeño cristal al agua, en el momento en que se zambulle deberías ver un atisbo de tu viaje y quizá, si tienes mucha suerte, a la ondina que baila en la bruma matutina.
K.D. Spitzer